Para conocer la historia de un pueblo necesitamos oir la voz de sus protagonistas expresada a través de sus textos, escuchar sus historias. Los autores de Roma fueron en muchos casos testigos privilegiados de su tiempo y protagonistas directos de numerosos acontecimientos.
La historia era un género literario más que, con sus propias normas y convenciones, tenía una función ejemplar y educativa.
Un pasado ejemplar.
En Roma el presente importaba mucho más que el pasado, por lo que resultaba muy fácil manipular e inventar acontecimientos pasados. Los autores narraban las conductas heroicas y ejemplares de los protagonistas del pasado para reforzar el espíritu patriótico de los lectores.
Una tradición selectiva.
La mayoría de las historias compuestas por autores romanos no han llegado hasta nosotros debido al complicado proceso de transmisión manuscrita y a otras circunstancias políticas.
La influencia griega.
La historia como tal es invención de los griegos, por lo que las primeras historias de Roma fueron escritas en griego, como la de Fabio Pictor. La influencia más importante fue la obra de Polibio. Los historiadores romanos siguieron su modelo para intentar explicar los acontecimientos narrados. Denominaron a sus obras "historias de origen griego".
Los anales.
Narraban los acontecimientos sucedidos cada año. En ellos se incluían todos los sucesos de Roma, año por año, sirviendo de modelo a los primeros historiadores romanos. El poeta Ennio fue el pionero.
Las fuentes de información.
Los historiadores romanos utilizaron diferentes fuentes de información para escribir su obra. Entre dichas fuentes destacan:
- Los documentos oficiales.
- Los archivos de las familias aristocráticas.
- Las obras de sus antecedentes que habían escrito sobre el tema.